Una vista de la Space Needle de Seattle y sus alrededores con una bahía al fondo.
Seattle asentado sobre la Zona de Subducción Cascadia. Crédito: Robert Ritchie, Unsplash

This is an authorized translation of an Eos article. Esta es una traducción al español autorizada de un artículo de Eos.

La Zona de Subducción de Cascadia, la cual se extiende la costa oeste de América del Norte desde el Norte de California hasta Columbia Británica, Canadá, es capaz de generar grandes terremotos. Pero los peligros sísmicos de la región no están bien entendidos. Un nuevo centro de investigación estudiará la región y aumentará la preparación.

El Centro de Ciencias de Terremotos de la Región de Cascadia (CRESCENT, por sus siglas en inglés) incluirá investigadores de 14 instituciones de Estados Unidos y se le han otorgado 15 millones de dólares de la Fundación Nacional de Ciencias de los Estados Unidos (NSF).

“El nuevo centro es muy emocionante”, dijo Ruth Harris, una científica senior del Centro de Ciencias de Terremotos del Servicio Geológico de los Estados Unidos, quien no está involucrada en el proyecto. “Cascadia tiene riesgos de terremotos significativos, por lo que es una región importante para centrarse”, explicó.

Un mejor entendimiento de las zonas de subducción

A sign reading “tsunami evacuation route” stands before a background of shrubs and cloudy sky.
Un cartel indica una ruta de evacuación por tsunami a lo largo de la costa del estado de Washington. Los sismos en la zona de subducción de Cascadia podrían provocar tsunamis en Columbia Británica, Oregón, Washington y más allá. Crédito: xtinarson, Pixabay

La zona de subducción de Cascadia es un límite de placa tectónica de 1,100 kilómetros de largo (700 millas de largo) que separa a América del Norte de la placa en subducción Juan de Fuca. La falla principal del área, llamada mega falla inversa, se subduce hacia el este debajo de la costa y de grandes ciudades como Seattle y Vancouver, B.C. Un mosaico de fallas más pequeñas atraviesa la corteza superior en Cascadia, lo que representa un peligro menor pero todavía significativo. Aunque la mega falla inversa presenta un movimiento silencioso regular, un gran terremoto no se ha producido en la falla desde 1700. Ese evento, estimado en una magnitud de 9.0, envió ondas de tsunami por el Pacífico.

A pesar del peligro, la preparación para terremotos en el noroeste del Pacífico está rezagada, dijo Diego Melgar, sismólogo de la Universidad de Oregon e investigador principal de CRESCENT.

“No fue hasta la década de 1990 que nos dimos cuenta de que, ¡rayos!, es todavía capaz de provocar grandes terremotos”.

A diferencia de California, donde los frecuentes terremotos de magnitud moderada han impulsado a los residentes y a los políticos a actuar, los grandes terremotos son poco frecuentes en el noroeste del Pacífico. Como resultado, el peligro sísmico pasó desapercibido durante generaciones. “Los científicos solían referirse a Cascadia como una zona de subducción extinta”, dijo Melgar. “No fue hasta la década de 1990 que nos dimos cuenta de que, ¡rayos!, es todavía capaz de provocar grandes terremotos”.

Los investigadores han hecho avances en las últimas décadas, pero hay una necesidad por más investigación, dijo Harold Tobin, profesor de la Universidad de Washington y director de la Red Sísmica del Noroeste del Pacífico (PNSN, por sus siglas en inglés), la cual monitorea los terremotos en la región. “Ha habido un fuerte enfoque en EE.UU. en los terremotos a lo largo de fallas transformantes como la falla de San Andrés, pero sabemos menos acerca de las zonas de subducción”, dijo. “Necesitamos llevar nuestro entendimiento de las zonas de subducción al mismo nivel que el de las fallas transformantes”.

CRESCENT reunirá a científicos de sismos que trabajan en Cascadia para abordar esa brecha.

Uno de los objetivos principales del centro es crear un modelo de fallas en la región examinado por la comunidad. “Hay un montón de fallas corticales de las que sabemos sorprendentemente poco”, dijo Melgar. Los investigadores de CRESCENT utilizarán datos del PNSN, observaciones de campo, experimentos y modelos informáticos para comprender mejor la ubicación y la estructura 3D de las fallas.

“CRESCENT puede ser la plaza del pueblo”.

Otra cuestión pendiente es la extensión en la cual la fricción mantiene la zona de subducción bloqueada, previniendo deslizamientos. Las placas bloqueadas acumulan tensión que eventualmente se libera en los terremotos. Un fuerte bloqueo por fricción puede producir fuertes terremotos. La zona de subducción bloqueada cerca de Japón, por ejemplo, ha producido muchos grandes terremotos en la historia reciente, incluido el terremoto de 2011 de Tōhoku de magnitud 9.0.

La mayoría de los investigadores concuerdan que parte de la Zona de Subducción de Cascadia está fuertemente bloqueada, pero los detalles a pequeña escala de dónde está bloqueada y dónde se desliza continuamente no están claros, lo que dificulta a los sismólogos pronosticar los peligros de terremotos y tsunamis.

“CRESCENT puede ser la plaza del pueblo donde la gente se reúna para hablar sobre estos problemas y resolverlos”, dijo Melgar. La investigación del centro ayudará a evaluar la probabilidad de terremotos, tsunamis y deslizamientos de tierra que podrían amenazar a las comunidades de Cascadia.

Convertir la ciencia en decisiones informadas

Además de facilitar la investigación, CRESCENT fomentará conexiones entre científicos y políticos, comunidades locales y la industria privada. “Queremos asegurarnos que los resultados científicos sean útiles y que se conviertan en decisiones informadas en todos los niveles”, dijo Tobin.

CRESCENT es una “oportunidad emocionante”, dijo Tim Dawson, gerente del Programa de Riesgos Sísmicos del Servicio Geológico de California, que no participa en CRESCENT. “El enfoque multidisciplinario…conducirá a nuevos conocimientos sobre el funcionamiento de las zonas de subducción con aplicaciones prácticas para la seguridad pública, la construcción de comunidades más resilientes y el desarrollo de la próxima generación de científicos de sismos”.

Caroline Hasler (@carbonbasedcary), Escritora de ciencia

This translation by Solange Fiallos Ayala (@sol_fiallos_ec) was made possible by a partnership with Planeteando and GeoLatinas. Esta traducción fue posible gracias a una asociación con Planeteando and GeoLatinas.

Text © 2023. The authors. CC BY-NC-ND 3.0
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