Source: AGU Advances
This is an authorized translation of an Eos article. Esta es una traducción al español autorizada de un artículo de Eos.
No se tienen registros suficientes en las bases de datos globales de los peligros meteorológicos extremos. Por ejemplo, los eventos donde las temperaturas son potencialmente mortales y que se ajustan a las normas climatológicas generalmente no son incluidos en los estudios de riesgos, y las inundaciones locales o regionales a menudo suelen pasar desapercibidas para los instrumentos satelitales.
En los últimos 20 años Texas ha experimentado una cantidad inusualmente alta de fenómenos climáticos extremos, incluyendo un incremento en inundaciones y olas de calor. Usando datos satelitales de fácil acceso de precipitación y temperatura tomados diariamente, Preisser y Passalacqua crearon una visión más amplia de los riesgos por inundaciones y olas de calor que han afectado al estado en los últimos años.
Al consultar los datos de precipitación del 2001 al 2020, los investigadores definieron como un evento de inundación peligrosa a aquellos que ocurren en promedio una vez cada dos años o más, lo que significa que un evento de esa magnitud ocurre en un área determinada con una frecuencia que no supera los dos años. Compararon sus resultados con los registrados en la Base de Datos de Eventos de Tormentas de la NOAA y la base de datos del Observatorio de Inundaciones de Dartmouth (DFO por sus siglas en inglés). Su análisis detectó tres veces más inundaciones que en la base de datos del DFO y se identificaron daños adicionales de $320 millones de dólares.
El equipo también amplió el análisis sobre el calor extremo. En muchos estudios previos sobre amenazas múltiples sólo se consideraron las olas de calor, donde las temperaturas superaron un percentil, como el 90 o el 95, durante tres días seguidos. Este estudio también consideró los periodos donde la temperatura de globo de bulbo húmedo (índice WBGT) supera un umbral de salud de 30°C, en lugar de un percentil determinado. Bajo esta definición, los científicos determinaron que, entre 2003 y 2020, Texas vivió 2,517 días con eventos peligrosos de calor, lo que equivale a casi el 40% de los días dentro de este periodo. Estos eventos afectaron un total de 253.2 millones de kilómetros cuadrados.
El estudio consideró como eventos de amenazas múltiples aquellos en los que coinciden inundaciones y episodios de calor extremo. Usando el método del intervalo de recurrencia promedio, junto con la definición más amplia de peligros, los investigadores encontraron que las zonas del estado con una alta concentración de poblaciones minoritarias estaban expuestas a un mayor riesgo ante este tipo de eventos multiriesgo. Esto sugiere que los métodos más antiguos pueden subestimar tanto la magnitud de los eventos de amenaza múltiple como el impacto desproporcionado en comunidades marginadas, de acuerdo con los investigadores. (AGU Advances, https://doi.org/10.1029/2025AV001667, 2025)
—Rebecca Owen (@beccapox.bsky.social), Escritora de ciencia
This translation by translator Oscar Uriel Soto was made possible by a partnership with Planeteando y GeoLatinas. Esta traducción fue posible gracias a una asociación con Planeteando and GeoLatinas.
